La emancipación de la América española (1810-1824)
Las ideas ilustradas se habían introducido entre el colectivo criollo. La revolución francesa y la Independencia de los Estados Unidos dieron alas a la idea de emancipación del dominio español. Como desencadenante del proceso, la guerra de la independencia en España provocó una situación de vacío de poder.
Las fases del proceso
Se construyeron juntas provisionales como en la Península, se constituyó la Junta de Regencia y los criollos obtuvieron una representación escasa. El malestar facilitó la aparición de diferentes movimientos emancipadores que culminarían con la independencia definitiva de la mayor parte de las colonias en 1824.
-Segunda fase (1815-1824) se consiguió la independencia de la mayoría de las colonias gracias a grandes campañas militares que contaron con la ayuda de Gran Bretaña y Estados Unidos. Fue crucial el pronunciamiento liberal de Riego, que fue apoyado por el mismo ejército que iba destinado a sofocar la rebelión de las colonias.
En México, Agustín Iturbide se enfrentó al virrey, quien acabó por reconocer la emancipación del nuevo país. Se constituyeron como estado independiente con el nombre de Provincias Unidas de Centro América.
En el sur, José de San Martín inició las campañas desde Argentina, derrotó a los realistas y proclamó la independencia de Chile.
Simón Bolívar, que había ocupado Nueva Granada (Colombia), Venezuela y Ecuador, crea una República llamada la gran Colombia.
En 1824 el ejército americano, liderado por el segundo de Bolívar, Antonio José de Sucre, venció al realista de la batalla de Ayacucho.
Representó al final del proceso emancipador de las colonias españolas en América. Tras conseguir la independencia de la metrópoli, los territorios de América quedaron en manos de generales y se construyeron regímenes dictatoriales.
Las consecuencias para España.
El imperio ultramarino español quedó reducido a Cuba, Puerto Rico y Filipinas. El Estado español quedó prácticamente en la quiebra al no disponer ya de los metales, las materias primas y los ingresos que le proporcionaba las colonias. También perdió el mercado americano. España perdió su imperio y quedó relegada a la condición de potencia de segundo orden.
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